Cómo ahorrar en la factura de la luz: consejos para ahorrar electricidad

Desde que en agosto de 2021 comenzara la crisis energética, el precio de la luz no ha dejado de subir. El máximo histórico se alcanzó el pasado mes de marzo, llegando a pagarse a 283,3 euros el megavatio hora en el mercado mayorista, lo que se tradujo en una factura media para el consumidor particular de 143,03 euros.

Desde octubre se observa una ligera moderación de los precios, fruto de las medidas aprobadas para reducir la factura eléctrica. Sin embargo, muchas personas se plantean cómo ahorrar aún más en la factura de la luz. Si este es tu caso, sigue leyendo para descubrir cómo lograrlo.

Mercado libre o regulado: analiza cuál te conviene más

La primera duda que se plantea quien quiere ahorrar electricidad es decidir si le resulta más adecuado estar en el mercado libre o en el regulado.

El mercado regulado es aquel cuyos precios están controlados por el Ministerio para la Transición Ecológica. Corresponde a la tarifa denominada Precio Voluntario al Pequeño Consumidor (PVPC). Su característica es que el precio de la luz cambia cada día y cada hora en función de lo que marca el mercado mayorista de electricidad. Por lo tanto, el precio de la factura de la luz al final de mes variará en función de la evolución del precio de la electricidad en el mercado mayorista, del consumo que hayas realizado y de a qué horas del día hayas hecho un mayor consumo.

La tarifa PVPC se puede contratar solo con las comercializadoras de referencia en el mercado regulado, y siempre que la potencia contratada en tu casa no supere los 10 kWh. Además, si quieres acceder al bono social, tendrás que tener contratada esta tarifa.

Por otra parte, en el mercado libre las compañías pueden establecer libremente sus tarifas de la luz. Pueden ofrecer una tarifa plana para todo el año, un precio variable como el del PVPC, precios diferentes según los horarios… También pueden ofrecer descuentos y otros servicios adicionales (como mantenimiento o un seguro) y dar la opción a sus clientes de contratar conjuntamente los suministros de luz y gas. Eso sí, las compañías suelen exigir permanencia de un año a quienes contraten estas tarifas.

¿Cómo saber si estás en el mercado libre o regulado?

Para saber si estás en el mercado libre o el regulado no tienes más que mirar tu factura de la luz, tanto si la recibes en papel como si es factura online. Fíjate en el apartado que indica el tipo de contrato: si aparece “PVPC – Mercado regulado”, tienes la electricidad contratada en el mercado regulado; si sale otro nombre de tarifa, estarás en el mercado libre.

También puedes averiguar si estás en el mercado regulado o en el libre consultando en la factura el nombre de tu compañía eléctrica. Estas son las ocho comercializadoras de referencia que pueden ofrecer la tarifa regulada:

• Energía XXI
• Gas & Power
• Curenergía
• Régsiti
• Baser COR
• Corenergético
• Teramelcor
• Energía Ceuta XXI

Compara entre la oferta de tarifas eléctricas disponibles

El siguiente paso para ahorrar en la factura de la luz es comparar tarifas entre los diferentes operadores, para dar con aquella que te ofrezca las mejores condiciones. Puedes hacerlo consultando en páginas webs comparadoras, o pidiendo a las empresas comercializadoras que te asesoren sobre sus tarifas.

Si quieres pagar la misma cantidad mes tras mes, puede interesarte más contratar una tarifa plana. Si puedes adaptar tu consumo eléctrico (poner lavadoras, lavavajillas, etc.) a los horarios valle (los momentos en los que el precio de la electricidad es más bajo, como en fin de semana o por la noche), es posible que te convenga una tarifa con discriminación horaria.

¿El cambio de compañía eléctrica es gratuito?

Si, tras comparar tarifas, ves que otra comercializadora te ofrece mejores precios y quieres cambiar de compañía, has de saber que el cambio es gratuito. Puedes hacer este cambio incluso aunque estés de alquiler, siempre que tengas el contrato a tu nombre.

Lo único que debes tener en cuenta es que si tu contrato actual tiene una cláusula de permanencia (lo habitual es que sean 12 meses), tendrás que asumir una penalización económica si quieres cambiar de compañía eléctrica antes de cumplir ese plazo.

El cambio de compañía se suele hacer efectivo de 15 a 20 días, y lo habitual es que recibas una última factura de tu anterior compañía correspondiente a los últimos días en que te ha prestado servicio.

Optimiza la potencia contratada

Una de las opciones para ahorrar en la factura de la luz tiene que ver con la potencia contratada. La potencia equivale a la cantidad de energía máxima que puedes usar al mismo tiempo. Se trata de un coste fijo que tendrás que pagar todos los meses en la factura, incluso aunque no haya habido consumo (si estás un mes fuera de vacaciones, este importe lo pagarás igual).

Por eso es muy conveniente que ajustes la potencia a las necesidades de tu hogar. En función de cuántas personas viváis en casa, del tamaño de la vivienda, de qué electrodomésticos tengáis y de cuántos acostumbréis a utilizar al mismo tiempo, necesitarás una potencia mayor o menor. La potencia más habitual en una casa en España oscila entre los 3,45kW y los 5kW.

Puede que te haya pasado que has querido utilizar varios electrodomésticos a la vez y ha saltado el interruptor de control de potencia. Si te pasa a menudo, significa que tienes una potencia contratada inferior a la que necesitas.

Para saber si tienes más potencia contratada de la que utilizas, revisa de nuevo tu factura, pues en ella obtendrás la información de la potencia máxima demandada en el último año.

El cambio de potencia contratada sí tiene un coste, pero puede compensarte por el dinero que te ahorrarás. Si quieres subir la potencia contratada, te costará unos 50 euros por cada kW que aumentes; si el cambio supone reducir la potencia, tendrás que abonar unos 9,04 euros más IVA en concepto de derechos de enganche.

Consejos para reducir el consumo de electricidad y ahorrar en tu factura

Tras optimizar tu tarifa de la luz, bien cambiándote de compañía bien reduciendo potencia contratada, gran parte del ahorro extra que puedas conseguir tendrá que ver con tus hábitos. Recopilamos para ti algunos consejos para reducir el consumo de electricidad en casa.

Apaga la luz

El primer consejo es muy obvio: apaga las luces de aquellas habitaciones en las que no estés. Además, si cambias las bombillas por otras LED de bajo consumo conseguirás un ahorro mayor.

Ojo a la calefacción

Si la calefacción de tu casa es eléctrica (radiadores o acumuladores eléctricos) lo notarás en la factura de la luz en los meses más fríos. Pero puedes reducir el gasto bajando la temperatura del termostato (se recomienda ponerlo a 20-21º durante el día y 15-17º por la noche); cerrando los radiadores de las habitaciones que no uses; y aislando puertas, ventanas y persianas. Como alternativa o complemento a la calefacción, si tu casa está bien orientada, sube persianas y descorre cortinas para aprovechar el sol para calentar las estancias. Cuando caiga el sol, baja las persianas.

Termo eléctrico

Si tienes termo eléctrico en casa, regula el termostato del agua a la menor temperatura, para evitar tener que mezclar el agua caliente con la fría para conseguir la temperatura deseada cuando te duches.

Elige electrodomésticos de bajo consumo

Cuando tengas que comprar algún electrodoméstico, fíjate en su etiqueta energética: van de la A a la G y los de clase A son los más eficientes.

Un buen uso de los electrodomésticos también te hará ahorrar energía: no abras continuamente la puerta de la nevera; si tienes vitro, aprovecha el calor residual para terminar de cocinar; espera a llenar lavaplatos y lavadoras para utilizarlos; y no dejes electrodomésticos como televisores u ordenadores en stand-by por la noche.

Siguiendo estas recomendaciones y eligiendo una tarifa de la luz más barata, conseguirás tu propósito de ahorrar electricidad.