1/ 6

Este número es indicativo del riesgo del producto, siendo 1/6 indicativo de menor riesgo y 6/6 de mayor riesgo.

Banco Santander está adscrito al Fondo de Garantía de Depósitos de Entidades de Crédito. Para depósitos en dinero el importe máximo garantizado es de hasta 100.000 euros por depositante en cada entidad de crédito.

Este indicador de riesgo hace referencia a la cuenta corriente Online.

Gig economy: qué es

16/03/2020

Comparte en redes sociales:

¿Sabes qué significa gig economy y cómo afecta al mercado actual de trabajo? Repasamos definición, historia, características y principales datos de esta nueva forma de trabajar tanto para empresas como para los trabajadores. Gig economy es un término que se utiliza para referirse a aquellos pequeños trabajos que se realizan sin relación de contrato laboral con la empresa que los encarga. El concepto se acuñó hace alrededor de una década en los Estados Unidos, cuando la crisis económica hizo surgir nuevas formas de contratación alternativas a la relación laboral tradicional. Pero, ¿en qué consiste?

Qué es Gig Economy

Gig economy se relaciona con la figura de los “freelancers” y profesionales tercerizados, una fórmula que permite a las empresas contratar a personas por un periodo de tiempo determinado o para desarrollar tareas específicas.

El nombre hace referencia a los “bolos” (gig en inglés), actuaciones esporádicas de músicos o artistas que cobran, precisamente, por cada bolo que realizan. Llevado el término al mercado laboral, la gig economy incluye todos aquellos trabajos que se realizan de manera independiente, con una duración concreta y sin tener una relación de exclusividad con la empresa que los contrata. Sería equiparable al trabajo de un autónomo o freelance con el rasgo característico de que suele tratarse de pequeños encargos o tareas bajo demanda.

Según un estudio de la consultora McKinsey, los datos oficiales indican que el 11% de la población activa de Estados Unidos y alrededor del 14% en la Unión Europea trabajan como autónomos o freelance. Pero esta cifra podría alcanzar del 20% al 30% de la población trabajadora si se incluyen en el cómputo otro tipo de acuerdos de trabajo, como los que han surgido con la gig economy.  El propio Parlamento europeo cifra en tres millones el número de trabajadores en formas de trabajo nuevas o atípicas. Se incluyen en este concepto los empleados con contratos de cero horas (aquellos en los que el empleador no está obligado a dar al trabajador unas horas mínimas de trabajo a la semana, un tipo de contrato usado para puestos como reponedores en supermercados o empleos en establecimientos de comida rápida), trabajadores domésticos o que realizan trabajos por vales (como actividades de limpieza, jardinería, cuidado de menores o ancianos), o los trabajadores de plataformas digitales.

Características de la gig economy

Las empresas acuden a esta fórmula de la gig economy por la flexibilidad que les ofrece, ya que solo pagan por el trabajo efectivamente realizado, y por los menores costes que supone, pues no necesitan tener en plantilla al personal que realiza estas tareas.

Otras características de los empleos de la gig economy son la flexibilidad horaria (no es necesario cumplir un horario determinado), la posibilidad de trabajar desde casa (teletrabajo), e incluso la deslocalización del puesto de trabajo (trabajar para una empresa que se encuentre en la otra punta del planeta). El trabajador decide qué trabajo aceptar y cuándo.

Con todo, hay voces, como la propia Unión Europea, que alertan de la inestabilidad y precariedad de los nuevos trabajos de la gig economy y han aprobado normas para proteger sus derechos. Hay que recordar que habitualmente el precio pagado por tarea es más bajo que en un trabajo formal, por lo que los ingresos del trabajador freelance dependerán del número de encargos que acepte, y esto puede influir en sus vacaciones y periodos de descansos. Además, este tipo de trabajadores con empleos no convencionales carece de la protección social que proporciona un contrato de trabajo.

Reparto a domicilio

Ejemplos de gig economy

El desarrollo de la tecnología ha sido lo que ha facilitado el auge de la gig economy, ya que es a través de plataformas en Internet o aplicaciones de móvil la forma en que se gestionan estos encargos. De hecho, rápidamente se nos vienen a la cabeza ejemplos como Uber, que ofrece conductores a usuarios que necesitan transporte, u otros como mensajero, cuidadores de mascotas, o riders de reparto de comida a domicilio.

Pero la gig economy puede aplicarse a multitud de campos. Por ejemplo, TaskRabbit es una plataforma que pone en contacto a profesionales de diferentes campos con potenciales clientes que necesitan de sus servicios. El cliente expone qué es lo que necesita (alguien que limpie su jardín o que le pinte la casa) e indica el precio que estaría dispuesto a pagar por la tarea. La web lo que hace es indicarle qué trabajadores se ajustan a su petición y presupuesto y les facilita el contacto.

Otro ejemplo de gig economy es Mechanical Turk, un servicio de Amazon que conecta empresas con cientos de trabajadores freelance a los que encargan tareas triviales por una pequeña cantidad de dinero. Tareas que de momento los ordenadores no pueden hacer, como puede ser etiquetar imágenes, responder encuestas, transcribir audios o recibos, etc.

La gig economy también alcanza a puestos de trabajo altamente especializados y bien pagados, como programadores informáticos o ingenieros. Por ejemplo, la empresa norteamericana de desarrollo de software Github ofrece puestos de trabajo “en remoto” en 18 países del mundo.

Y podríamos seguir aportando ejemplos… Lo cierto es que la digitalización está haciendo surgir nuevas formas de trabajo y provocando cambios en el mercado laboral, que suponen desafíos e incertidumbres, como es el caso de gig economy. Tal y como señala el informe de McKinsey anteriormente citado “ha habido muchos comentarios acerca de si el cambio hacia trabajos independientes es empoderador o pone a más trabajadores en situaciones precarias”. El informe resalta que “el problema no es blanco o negro, ya que la fuerza laboral independiente comprende personas con gran variedad de circunstancias”.