Motos eléctricas: la alternativa silenciosa a las motos de combustible

En los últimos años, el mercado de las motos eléctricas ha visto cómo han ido aumentando sus cifras de ventas considerablemente. Cada día son más los que se decantan por esta nueva forma de movilidad como una opción que muestra un claro compromiso con el medio ambiente, al eliminar todo tipo de emisiones contaminantes.
En cuanto a su aspecto son casi idénticas a las motos convencionales, aunque cuentan con menos piezas y apenas hacen ruido, son la alternativa silenciosa. Hoy te contamos más sobre las motos eléctricas para moverte por tu ciudad.

Ventajas de las motos eléctricas

Si eres de los que te mueves a diario entre el tráfico de la ciudad y estás valorando la compra de un vehículo con el que desplazarte, la moto eléctrica se presenta como la alternativa perfecta teniendo en cuenta la suma total de sus ventajas, que no se limitan a las cuestiones medioambientales, si no también al ahorro que supone en cuanto:

• precio
• combustible
• mantenimiento
• tiempos de desplazamiento

Facilidad de recarga en numerosos puntos

La primera duda que asalta a cualquier conductor interesado en la compra de un vehículo eléctrico es el tema de su recarga, todavía hoy la falta de infraestructuras de recarga sigue lastrando la venta de coches eléctricos pero lo cierto es que en el caso de las motos la situación es muy distinta ya que la mayor parte de las marcas con presencia en este mercado han apostado por modelos que pueden recargarse en un enchufe convencional, sin necesidad de tener que buscar un enchufe especial.

A diferencia de los coches, muchos modelos de motos eléctricas cuentan además con baterías extraíbles e intercambiables, lo que te permitirá sacarlas para poder cargarlas en cualquier lugar mientras dispongas del tiempo necesario. Una carga completa tarda entre 4 y 8 horas.

Por otra parte, hoy existen varias apps que te informan de los puntos de recarga más cercanos, como ChargePoint, Electromaps, PlugShare, Chargemap-Estaciones de carga…

Económicas: precio de la electricidad por debajo del combustible

A pesar de la subida del precio de la electricidad, lo cierto es que este sigue siendo bastante más bajo que el precio de la gasolina. Recargar la batería de una moto eléctrica resulta mucho más barato que acudir a una estación de servicio a llenar el depósito de combustible.

Son limpias y silenciosas: respetan el medioambiente

Son vehículos eco-friendly, que cumplen con la Normativa europea sobre calidad del aire. No emplean gasolina como combustible ni tampoco aceite, además, son muy silenciosas. Así que no generan emisiones contaminantes de ningún tipo, ni gases, ni olores, ni ruidos, respetando el medio ambiente.

Impuesto de matriculación y circulación bonificados

Si te compras una moto eléctrica lo más probable es que no tengas que pagar ni el impuesto de circulación ni el de matriculación, este tipo de vehículos está exento del pago de esos impuestos en la mayoría de ayuntamientos. Eso sí, aunque estén bonificados, si es necesario presentar los correspondientes justificantes de exención y abonar la tasa correspondiente al coste del trámite.

Autonomía: hasta 100 Kms diarios

La evolución de las motos eléctricas en los últimos años ha dejado atrás los problemas de autonomía que presentaban los primeros modelos. Hoy, la mayoría cuenta con una autonomía de unos 100 kilómetros de media, lo que las convierte en vehículo ideal para moverse por la ciudad.

El contar con baterías extraíbles te permite viajar con una de repuesto si planeas hacer un viaje más largo.

Menos componentes mecánicos: ahorra en reparaciones

Al contar con menos componentes mecánicos, su mantenimiento es menor ya que no necesitan tantos cuidados, las averías son menos. Los cuidados se limitan a la batería, los frenos y los neumáticos.

Uno de esos elementos de los que han prescindido las motos eléctricas es el tubo de escape, con lo que se elimina el riesgo de quemaduras en los pasajeros tan habitual en las motos convencionales con motor de combustión.

Pueden circular en zonas restringidas por contaminación

En la actualidad muchas de las grandes capitales europeas han establecido límites a la circulación de vehículos por combustión. Lugares como Londres, París, Roma, Berlín, Ámsterdam o Lisboa, por ejemplo, han limitado el tráfico por las zonas centro como medida para frenar los índices de contaminación. En España, tenemos el caso de Madrid Central, un perímetro de bajas emisiones.

Las motos eléctricas al no generar ningún tipo de contaminación (ni gases ni ruidos) no se ven afectadas por esas restricciones.

¿Se puede conducir una moto eléctrica sin carnet B?

Si te preguntas con qué carnet puedes conducir una moto eléctrica la respuesta es que están sujetas a las normativa de la Dirección General de Tráfico relativa a los vehículos de dos ruedas. Esta normativa especifica que para poder conducir un vehículo de estas características es obligatorio tener un permiso de conducir en vigor. Dependiendo de la potencia del motor y de la velocidad que pueda alcanzar será necesario un tipo de carnet diferente:

• Las motos que no superen los 45 km/h necesitan el carnet AM.
• Las motos con una potencia de motor de hasta 11 KW y que puedan superar los 45 km/h necesitan el carnet A1 o el carnet B con tres años de antigüedad.
• Si la potencia está entre los 11 KW y los 35 KW, carnet A2.
• Con el carnet A podrás conducir cualquier moto eléctrica, sea cual sea su potencia y velocidad.

La presencia de este tipo de motos en vías urbanas y carreteras no se limita a las scooters, las grandes marcas han visto que el futuro pasa por los motores enchufables, Kawasaki se ha comprometido a que en 2035 todas sus motos sean eléctricas e híbridas e iconos como Harley Davidson ha creado su propia marca de motos eléctricas. El avance de las motos eléctricas es indiscutible.